lunes, 6 de abril de 2015

¿ Sabías el origen de la palabra "dabuti"?

 El origen de esta palabra se debe a una anécdota que se produjo en la subida al trono de Amadeo de Saboya, un italianini que reinó en España entre 1870 y 1873. el colega Amadeo invitó a sus amigotes de los altos cargos del Estado a una cena. Pidió al camarero que le sirviera su vino preferido, que había traído en una caja especial desde el Piamonte, el vino de la ya desaparecida bodega “Da Butti”. Cuando el camarero llegó a la cocina nadie había visto ni oído hablar de esa caja de vino. En ese momento el jefe de los cocineros, Don Ignacio de Saavedra, Nacho para los amigos, se armó de valor y llevó al rey el mejor vino que tenía y explicándole que no daban con las botellas “Da Butti”. Cuando se lo ofreció y le explicó lo sucedido, Amadeo de Saboya se alzó y pronunció unas palabras con su marcado acento italiano para todos los comensales: “Quiero agradeceros a todos haber venido aquí esta noche para celebrar conmigo el comienzo de una nueva era en España, la de la casa de Saboya. Quiero que sepáis que aunque esta no sea mi ciudad, me lo parece, que aunque no seáis la familia con la que me crié, me lo parecéis, y que este vino, aunque no lo sea, a mí me parece Da Butti“. Durante el aplauso que siguió a este breve discurso la gente comenzó a preguntarse qué era lo último que había dicho el rey, ya que el vino Da Butti por entonces era completamente desconocido en España. Al no entender que se trataba de un vino, los comensales creyeron que era sencillamente alguna expresión italiana para indicar que algo es del propio agrado, por lo que pronto se extendió entre la alta alcurnia decir que algo “era dabuti“. De ahí su uso se fue popularizando hasta que ya a mediados del siglo XX su uso era común incluso entre las esferas sociales más bajas.

Pues ya lo sabéis. ¡ Cuánto vais a aprender conmigo, madre mía! Jajajajaja...

Que tengáis un día dabuti 

2 comentarios:

  1. Pues sí que vamos aprender contigo sí...
    Otro beso (no te acostumbres)
    by Ana Minaya

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    Respuestas
    1. Soy un diamante en bruto. Desaprovechada.
      Qué vicio tienes con los besos, hija! Jajajaja!

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